Se solicitará al Gobierno Nacional que disponga de un presupuesto actualizado para el presente año que garantice la continuidad de sus funciones académicas, de investigación, salud y extensión, además de la actualización de las partidas vinculadas a paritarias docente y nodocente.
Presupuesto 2023 prorrogado, inflación récord en diciembre (25,5%) y enero (20,6%), y un inminente conflicto con los docentes universitarios para febrero y marzo, encendió las alarmas en la UBA que, tras una reunión de su Consejo Superior, señaló que “solicitará al Gobierno Nacional que disponga de un presupuesto actualizado para el presente año que garantice la continuidad de sus funciones académicas, de investigación, salud y extensión, además de la actualización de las partidas vinculadas a paritarias docente y no docente”.
El organismo universitario, en lo que fue una sesión extraordinaria de este martes 20 de febrero, también solicitó al Rector de la bicentenaria casa de estudios, Ricardo Gelpi, que curse diversas “gestiones ante el Ministerio de Capital Humano, a fin de que la Universidad de Buenos Aires disponga de un presupuesto para el presente año que garantice la continuidad de sus funciones en docencia, investigación, salud y extensión”.
La UBA es la universidad más grande del país en cantidad de alumnos, trabajadores docentes y no docentes, y también, debe mantener grandes estructuras y actividades a desarrollar en sus facultades, sus colegios preuniversitarios, hospitales y en todas sus instalaciones universitarias.
También reclaman al Ministerio de Capital Humano “la actualización de las partidas vinculadas a paritarias del personal docente como no docente, a fin de recomponer el valor adquisitivo de los salarios en virtud de la inflación registrada”.
El pedido también se dirige a la Jefatura de Gabinete de Ministros, a la que le piden la asignación del presupuesto necesario para las actividades de ciencia y tecnología, “a fin de sostener un sistema que es pilar esencial del mantenimiento de investigación y docencia de calidad en nuestras universidades públicas”.
En el documento publicado, el Consejo Superior de la UBA aseguró que hará todo lo necesario ante el Gobierno Nacional para lograr la actualización del presupuesto destinado a los gastos de funcionamiento integral de la universidad, así como la actualización de las partidas vinculadas a paritarias del personal docente como no docente, a fin de recomponer el valor adquisitivo de los salarios en virtud de la inflación registrada.
