A pesar de la eliminación del fondo fiduciario que financiaba el plan Progresar, el Gobierno afirmó que las becas para estudiantes seguirán vigentes. La medida, que afectó también a otros fondos como el Fondo Nacional de Emergencias y el Fondo para la Protección Ambiental de los Bosques Nativos, generó preocupación entre los más de un millón de jóvenes que dependen de estas ayudas para continuar con sus estudios.
El presidente Javier Milei utilizó las facultades otorgadas por la Ley de Bases para eliminar estos fondos, lo que disparó especulaciones sobre la continuidad de las becas. Sin embargo, desde el Ministerio de Capital Humano aclararon que la supresión del fondo fiduciario no afecta al programa. Las becas seguirán siendo pagadas con recursos del presupuesto asignado a la educación, y no dependerán de un fondo que, según explicaron, nunca llegó a implementarse plenamente.
Un programa clave para los jóvenes
El plan Progresar, creado en 2014 durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, apoya a estudiantes de entre 16 y 24 años que desean iniciar o terminar sus estudios, ya sea en el nivel básico, superior o en capacitaciones laborales. Actualmente, más de 1.021.000 becarios reciben esta ayuda. La mayor parte de ellos, alrededor de 466.000, se encuentra en el programa de educación básica, mientras que el resto está distribuido entre formaciones laborales, estudios de enfermería, carreras universitarias y no universitarias.
A pesar de la eliminación del fondo, el vocero presidencial Manuel Adorni aseguró a través de un comunicado en la red social X que el programa no se verá afectado: «El gobierno sigue financiando las becas Progresar, que incluso han visto un aumento del 75% en septiembre». Este ajuste elevó el valor de la beca de $20.000 a $35.000.
Confusión y antecedentes
La confusión generada por la publicación en el Boletín Oficial llevó a muchos a interpretar la medida como un recorte del programa en medio de la discusión por el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario. No obstante, desde el gobierno se insistió en que el Progresar seguirá activo y que los beneficiarios seguirán cobrando en tiempo y forma. La eliminación del fondo fiduciario, que fue creado en enero de 2022, pero nunca implementado, no afecta el financiamiento del programa.
Evolución del programa
Desde su creación, el Progresar ha experimentado varias modificaciones. Durante el gobierno de Mauricio Macri, se amplió el límite de edad hasta los 30 años y se duplicaron los montos. Con Alberto Fernández, se incluyó a adolescentes de 16 y 17 años y se lanzó un programa de certificación de lenguas extranjeras. Al final de su mandato, el plan fue extendido para abarcar a jóvenes de hasta 35 años e incorporó controles de salud y beneficios para extranjeros.
Con el gobierno de Javier Milei, el límite de edad se volvió a fijar en 24 años para la mayoría de los beneficiarios, salvo excepciones para poblaciones prioritarias como personas con discapacidad, jóvenes trans, pueblos originarios y refugiados.
A pesar de la polémica, el gobierno insiste en que el programa continuará apoyando a los jóvenes más vulnerables, a quienes ayuda a finalizar sus estudios y mejorar sus oportunidades laborales.