El miércoles 29 de septiembre, el ministro de Educación de la Nación, Jaime Perczyk, recibió al presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), Rodolfo Tecchi, y el presidente del Consejo de Rectores de Universidades Privadas (CRUP), Rodolfo De Vincenzi, para dialogar y firmar una declaración de intención sobre el retorno a la presencialidad plena cuidada en todas las universidades del país.
De la reunión también participaron el jefe de Gabinete de la cartera educativa nacional, Daniel Pico, el secretario de Políticas Universitarias, Oscar Alpa, el subsecretario de Políticas Universitarias, César Albornoz, el rector de la Universidad Nacional del Litoral, Enrique Mammarella, y el rector de la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales, Gastón O´Donnell.
Esta declaración manifiesta que se recomienda “el retorno a la presencialidad plena cuidada a todas las Instituciones Universitarias del país”. Aunque, se “reconoce la diversidad de actividades que las Instituciones Universitarias llevan adelante, y que una alteración del “contrato académico» en desarrollo podría afectar el derecho a la educación por organización laboral, familiar y social”.
“La mejora en los indicadores sanitarios y el éxito de la campaña de vacunación contra el COVID 19 nos permite avanzar en la presencialidad en las universidades nacionales de todo el país” decía en la oportunidad el ministro Perczyk. “Además, creemos que es fundamental respetar la autonomía universitaria y contemplar las particularidades del estudiantado de cada casa de altos estudios, por eso entendemos que este paso hacia la presencialidad debe ser consensuado con todas las partes” agrego.
La declaración recomienda, en el marco de la autonomía universitaria, el retorno a la presencialidad plena cuidada para todas las Instituciones Universitarias del país, y las dificultades que esto podría implicar para con los miembros de los distintos claustros (docentes, no docentes y estudiantes).
A su vez, el documento generado de esta reunión no dejó de destacar que “las Instituciones Universitarias mantuvieron en todo momento el desarrollo de las actividades académicas y que en el transcurso del aislamiento por la pandemia desarrollaron diversas modalidades para continuar y sostener las clases”
El nuevo titular de la SPU, y rector en uso de licencia, de la Universidad de La Pampa, Oscar Alpa, detallo a este medio lo planteado en la reunión. Por un lado, sobre la presencialidad plena cuidada, decía que “este cuidado tiene que ver también con las distintas realidades en cada jurisdicción. Porque hay un responsable en cada lugar con el que hay que coordinar y ver cómo se trabaja en cada situación. La pandemia ha ido generando distintos ritmos en cada uno de los lugares, y la universidad se tiene que ir adaptando a ello y teniendo los cuidados”.
Alpa señaló también que este retorno se da por la baja en los contagios de COVID-19, y “es gracias a la vacunación, lo estamos viendo y entonces rápidamente tenemos que volver a la presencialidad”. Pero, no dejo de señalar que, el sistema universitario, “no es como la primaria o la secundaria, que todos viven cerca del colegio y ‘bueno listo, hay que volver, se vuelve el colegio’, sino que, inclusive lo definió el ministro, lo que llamamos este «contrato académico», -no hay ningún contrato, pero para entenderlo-, que cualquier estudiante que se inscribe en una materia en el primero o en el segundo cuatrimestre, siempre pregunta si va a ser presencial, virtual, en qué horario, y en función de eso define si la va a cursar o no la va a cursar. En la mitad del cuatrimestre no podemos cambiarlo”.
El rector de la Universidad Abierta Interamericana y presidente del CRUP, Rodolfo De Vincenzi, decía en diálogo con este medio: “Celebramos la voluntad política del Gobierno nacional, como también de las distintas provincias y el gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, para eliminar los obstáculos que condicionen un retorno a la presencialidad plena. Con ello creemos que las universidades deberán evaluar en cada caso los retornos a la presencialidad que consideren los óptimos para favorecer el mejor desarrollo de sus propios modelos educativos con criterios de calidad”.
“Es importante hacer ver que la pandemia ha acelerado procesos que la Universidad viene poniendo en debate hace ya diez años por lo menos” manifestó. En línea con esto, agregó que “Quienes pudieron vivenciar evolutivamente una virtualidad virtuosa durante la pandemia comprendieron que el aula virtual no es llevar al zoom lo que se hacía en un aula presencial”, y sumo “Las competencias profesionales para las que se habilita un título profesional implican un saber hacer complejo y ese saber hacer requiere el dominio previo de contenidos antes de ser abordado”.
De Vincenzi, señaló que “ la mejor versión para que un docente enseñe contenidos hemos aprendido que es la editada con los recursos tecnológicos y audiovisuales existentes en la actualidad, el docente puede lograr una mejor versión en un video de 20 minutos que en una exposición presencial de dos horas de clase presencial”. Y añade: “Y la mejor versión de los alumnos para abordar contenidos también es la editada, porque puede acceder a ese video las veces que quiera, retrocediendo o adelantando las veces también que quiera, en una modalidad autogestiva de su aprendizaje”.
