En la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires, tuvo lugar este martes una conferencia de prensa del Frente Sindical de las Universidades Nacionales –integrado por CONADU, CONADU Histórica, FEDUN, FAGDUT, UDA, CTERA y FATUN– para anunciar el estado de alerta y el paro nacional del próximo jueves 14 de marzo como respuesta a los recortes presupuestarios a las universidades del gobierno de Javier Milei.
“Estamos dando comienzo a un plan de lucha en las universidades nacionales que tiene como disparador la situación salarial de los y las docentes universitarias, a raíz de una paritaria totalmente impuesta en la que no se ha podido discutir la ridícula suma del 16% de aumento. Un gobierno que habla de libertad pero que nos corta las paritarias libres”, señaló Carlos De Feo, Secretario General de CONADU cuando abrió el panel de exposiciones.
“Quieren cerrar las universidades públicas y por eso no solamente las ahogan financieramente y rebajan los salarios de sus trabajadores y trabajadoras, sino que también fomentan una campaña de descalificación”, exclamó y agregó que “Están tratando de destruir la universidad. Pero todos nosotros ꟷtrabajadores y trabajadoras, docentes y no docentes, unidos con estudiantes y con las autoridadesꟷ no lo vamos a permitir. Estamos de pie y dispuestos a luchar hasta que los funcionarios que no sirvan, se vayan”.
A su turno, Walter Merkis, Secretario General de la FATUN, se refirió al paro nacional universitario convocado para este jueves. La medida va a durar 24 horas y será sin asistencia a los lugares de trabajo, con actividades de visibilización por todo el país: “Nuestras universidades van a estar cerradas porque es una universidad de luto, porque la están matando con este congelamiento y con todo lo que están llevando adelante”.
Daniel Ricci, Secretario General de la FEDUN, puso el foco en la importancia de la unidad: “No es una casualidad que estemos todos juntos pensando lo mismo. Me parece que la tensión en la universidad pública es tan fuerte que genera esto, que estemos todos los sindicatos y docentes universitarios juntos (…) Estamos orgullosos de las universidades públicas. Las universidades públicas son las aulas, los laboratorios, los hospitales y un montón de cosas, pero principalmente son el esfuerzo cotidiano de sus trabajadores, docentes y no docentes”.
En la misma línea se manifestó Francisca “Paquita” Staiti, Secretaria General de la Conadu Histórica: “Frente al embate del gobierno nacional, de las políticas que vienen por nosotros y nosotras, que vienen por la educación, por la salud, que vienen a destruir la función primera que tiene el Estado como garante de derechos, frente a una situación tan grave las dirigencias de cada una de las federaciones venimos construyendo esta unidad. Algo inédito. Y a la vez con esta foto mostramos la necesidad de que la unidad se amplíe todavía más hacia el sector estudiantil, hacia las autoridades. Lograr un gran movimiento en defensa de la universidad pública. Pero, fundamentalmente, en defensa de lo público”.
El Secretario General de UDA, Norberto Cabanas, apuntó contra el gobierno nacional: “La responsabilidad de este paro es pura y exclusivamente del gobierno nacional, que esquiva e incumple una obligación que es constitucional, que es legal. Pero lo peor es que se trata de un gobierno que se jacta, se enorgullece de impedir la apertura de nuevas universidades nacionales”.
Cuando tomó la palabra, Angélica Graciano, Secretaria Gremial de CTERA, enmarcó el conflicto: “Las universidades nacionales, las escuelas, son el principal enemigo. Nos declararon los principales enemigos de este proceso de disolución nacional porque nosotras y nosotros democratizamos el conocimiento, proponemos a todas las compañeras y compañeros que transitan por nuestras aulas la esperanza, la posibilidad de movilidad social. Y también porque somos el principal obstáculo para que las empresas se apropien de nuestras casas de estudio”.
Finalmente, desde FAGDUT, el Secretario General Norberto Heyaca subrayó algunas de las consecuencias directas de la pérdida del poder adquisitivo de los salarios universitarios: “No solamente se ve afectada nuestra capacidad alimentaria, también la de tener salud. Si bajan nuestros sueldos y suben las prestaciones, disminuye nuestra atención médica”.
